El milagro reconoce que todo el mundo es tu hermano así como mi hermano
también. Es una manera de percibir la marca universal de Dios.
El error
que el milagro corrige es el de
creer que estamos separados. Bien sea que estemos separados por nuestros
cuerpos o por las cosas terribles que creemos que hace la gente, todo lo que
hace el milagro es reflejar el hecho
de que somos uno, y eso es lo que Jesús
nos está recordando siempre—que todos somos uno con él. La "marca
universal de Dios" será el compartir en la luz de Cristo.
Es algo así como un
sistema inclusivo. No excluye a nadie.
No excluye
a nadie. No podría ser la Filiación si excluyera a alguien.