Ahora debes aprender que sólo la paciencia infinita produce resultados inmediatos. Así es como el tiempo se intercambia por la eternidad.
La paciencia infinita recurre al amor infinito, y, al producir resultados ahora hace que el tiempo se haga innecesario.
Hemos dicho repetidamente que el tiempo es un recurso de aprendizaje que será abolido cuando ya no sea necesario. El Espíritu Santo, que habla en favor de Dios en el tiempo, sabe también que el tiempo no tiene sentido. Él te recuerda esto en todo momento porque Su función especial consiste en conducirte de regreso a la eternidad y permanecer allí para bendecir tus creaciones. El es la única bendición que realmente puedes dar, pues es verdaderamente bendito.
Puesto que Dios te dio el Espíritu Santo libremente, tienes que darlo tal como lo recibiste.
T-5.VI.12