Principio 48

El milagro es el único recurso que tienes a tu inmediata disposición para controlar el tiempo. Sólo la revelación lo trasciende al no tener absolutamente nada que ver con el tiempo.

Repito, la revelación nos une directamente con Dios; el milagro, a través del des-hacimiento de las creencias en la separación que radican en nuestra mente, nos une los unos con los otros. 

La revelación no es una corrección—eso es el milagro—pero nos ayuda a recordar que éste no es el mundo real. La experiencia reveladora refuerza aquello que es verdadero, y así, sirve como un poderoso recordatorio cuando sentimos la tentación de creer en la realidad de lo que es falso.

¿Cree el Curso que podemos tener la revelación mientras somos cuerpos todavía? 


Sí, dice que la revelación será breve, efímera, temporaria. La gente va a tener experiencias en las cuales tienen una sensación directa de la Presencia de Dios, donde por un instante el mundo entero desaparece del todo. Un Curso En Milagros diría que esto es posible pero, repito, no es la meta y ciertamente no forma parte alguna de su teoría. Realmente no se menciona más después del Capítulo 1 en el texto.