Los milagros son a la vez comienzos y finales, y así, alteran el orden
temporal. Son siempre afirmaciones de renacimiento que parecen retroceder, pero
que en realidad van hacia adelante. Cancelan el pasado en el presente, y así,
liberan el futuro.
La mejor
manera de entender esto es en términos de este diagrama. Podemos pensar en este
camino como en una alfombra que refleja todo el transcurso de nuestra
experiencia en este mundo. Lo que hace el milagro
es tomar ciertos aspectos de esta experiencia, todos los cuales están
cimentados en la creencia en la separación o en nuestra culpa [de aquí es de
donde procede el comienzo y el final], y en un sentido, los aísla como áreas
problemáticas con las que tenemos que lidiar.
Digamos que
tenemos una particular dificultad con una relación. El milagro causaría que nos concentráramos en esa relación y la
perdonáramos. En ese sentido, será un comienzo y un final porque circunscribe
el problema. Cuando sanamos el problema, lo que significa que perdonamos a la
persona que ha sido nuestra mayor dificultad, o cuando verdaderamente
nos
liberamos de una situación que ha provocado sentimientos de separación,
ansiedad, culpa, ira, etc., lo que ocurre es que todo este aspecto del tiempo
se ha reducido. Eso es lo que quiere decir con que los milagros "alteran
el orden temporal."
El Curso enseña que cuando empezó la
separación, en ese sólo instante, todo el tiempo, el mundo completo de la evolución,
ocurrió simultáneamente T-26.V.3. En
ese único instante en que creímos que nos habíamos separado de Dios, surgió una
enorme alfombra. Esta es la alfombra que constituye el mundo entero de la
evolución -pasado, presente y futuro.
Un Curso En Milagros también enseña que en ese mismo instante en que pareció ocurrir la
separación, Dios creó al Espíritu Santo,
Quien deshizo la creencia que le dio origen a esta alfombra. Es como si la
separación hubiese ocurrido en un instante, y se hubiese corregido en ese mismo
instante. Sin embargo, el problema es que nosotros todavía creemos que este
mundo de tiempo y espacio donde habitamos, el cual es realmente un sueño, es la
realidad. Por eso el Curso habla del
Espíritu Santo como una Voz. Él es
la Voz de Dios Que Se extiende en el sueño de tal manera que podamos despertar
del sueño, y el mundo entero de la evolución es parte de este sueño.
Una de las
formas en que el ego nos ha arraigado en este sueño, en la creencia de que éste
es realidad, ha sido fabricando la noción de que el tiempo es lineal: pasado,
presente y futuro. Este es el principal obstáculo al tratar de entender cómo el
Curso ve el tiempo y cómo opera el milagro. Nuestras mentes están tan
estructuradas en la creencia de que el tiempo es lineal que es imposible para
nosotros reconocer que el tiempo es realmente holográfico, que es un modelo que
nos ha presentado la física cuántica.
La holografía enseña que dentro de cada parte está
contenido el todo, lo cual significa que dentro de cada una de las mentes, a
pesar de lo que creamos conscientemente, reside toda la historia del ego, que
es la historia completa no sólo de este planeta, sino del universo físico en su
totalidad.
Lo que hace
que éste sea un concepto tan aterrador para la mente, es que ésta [y por
consiguiente el cerebro] ha sido muy severamente limitada por la estructuración
temporal que nosotros fabricamos, la cual es una visión lineal: pasado,
presente y futuro.
Lo que
realmente sucede es que en cualquier determinado momento nosotros escogemos
experimentar una porción particular de este holograma; hurgamos en nuestra
mente y decidimos recorrer o experimentar una parte de todo este sueño. Esto es
lo que quiere decir el Curso cuando
afirma que repasamos un guion que ya está escrito. L-pI.158.3-4.
Este es el guion.
El Espíritu Santo no lo escribe. El Espíritu Santo no causa las cosas que
nos ocurren en este mundo. Lo que sí hace es unirse con nosotros en este guion
y enseñarnos que hay otra manera de interpretarlas. Hay una línea en el libro
de ejercicios donde el Curso habla
del Espíritu Santo como "Aquel
que escribió el guion de la salvación en el Nombre de Su Creador". L-pI.169.9:3.
El guion de
la salvación es el mismo del ego puesto al revés. Allí donde el guion del ego
tenía como propósito reforzar la creencia en la separación, el Espíritu Santo utiliza ese guion, que
representa a todas las relaciones y situaciones en nuestra experiencia, de tal
manera que podamos aprender que no estamos separados. El utiliza al mundo como
un salón de clases; el ego lo utiliza como una prisión. Es el mismo mundo, pero
el modo en que el ego lo interpreta nos arraiga aún más en éste. La manera en
que el Espíritu Santo lo interpreta
nos libera de ese mundo.
Lo que nos
mantiene en esta alfombra es la culpa, lo cual significa que la manera de
despertarnos de este sueño, o de sacarnos de la alfombra, es que nos liberemos
de esta culpa. Eso es lo que hace el perdón. El único reclamo que hace el Curso para sí mismo es que ahorrará
tiempo. Lo afirma repetidamente. Por ejemplo, Jesús afirma que si hacemos lo que él dice, ahorraremos tiempo. T-18.VII.4-6, y muchas veces él dice
que podemos ahorrar mil años. T-1.II.6:7.
Un Curso En Milagros no habla específicamente sobre el tema de la
reencarnación o de vidas pasadas, excepto en un lugar, pero no toma ningún
partido. M-24.3:1. Ciertamente, sí
implica en muchas referencias, no obstante, que ésta no es la primera vez que
hemos venido al mundo. Cuando dice que podríamos ahorrar mil años, lo que en
realidad dice es que podríamos ahorrarnos muchas, muchas vidas. Esto significa
que si tenemos un enorme problema de culpa que hemos expresado en cierta área
de nuestras relaciones, hay algo que hacemos continuamente que refuerza el odio
a nosotros mismos o nuestra creencia en la separación.
En el lapso ordinario de tiempo,
podría tomarnos diez vidas trascender esto, el regresar una y otra vez hasta
que lo hayamos superado. No obstante, si elegimos solucionar este difícil
problema, lo que generalmente significa una relación o una situación que el
mundo juzga difícil, repleta de dolor, angustia y sufrimiento, y que en
realidad podríamos mirar de un modo diferente, lo cual implica entender
básicamente que no somos víctimas ni de esta otra persona ni de nosotros
mismos, entonces podremos erradicar el problema en una sola vida.
Esto es lo
que quiere decir el Curso al afirmar
que podríamos ahorrar tiempo o que podríamos ahorrar mil años. Eso es lo que
significa que el milagro abole el
tiempo, o que "altera el orden temporal." No abole el lapso de tiempo
en su totalidad; no es eso lo que hace. Lo que sí hace es colapsar la cantidad
de tiempo que nos tomaría erradicar el enorme problema de culpa que tenemos.
Ciertamente, no es necesario entender o estar de acuerdo siquiera con toda
esta visión metafísica del tiempo. Lo que sí es necesario, es entender, cuando
usted se encuentra en una situación muy difícil y dolorosa, que existe un
propósito que usted podría identificar en esa situación. El propósito es que no
se vea como una víctima, y en la medida que aprenda eso, en esa misma medida
sanará toda esa culpa que hay en usted. Eso es lo que ahorra tiempo.
Entiendo
lo que usted dice, pero es difícil ver esto en términos del ego colectivo, del
cual existen muchas partes. Algunas partes de este ego están de regreso,
enrollando la alfombra, y otras la están desenrollando aún más. Es como dar un
paso hacia adelante y dos hacia atrás. ¿Cómo se enrollará al fin esta alfombra?
El Curso dice que "el desenlace es
tan seguro como Dios". T-2.III.3.10;
T-4.II.5:8. Yo creo que dentro de la ilusión tomará mucho, mucho tiempo.
Como enseña el Curso, hay una
cantidad tremenda de miedo en este mundo.
Este se perpetúa a sí
mismo.
Así parece.
Cuando Helen comenzó a recibir este material procedente de Jesús, él le dio una breve explicación de lo que ocurría. Describió
la difícil situación en que parecía estar el mundo, y le dijo que había una
prisa celestial. Dijo que se le estaba pidiendo a la gente que regresara al
mundo y prestara su talento a beneficio de este plan como una manera de ayudar
a otros a cambiar de pensamiento más rápidamente. Un Curso En Milagros sería una de las partes del plan. Helen y Bill
desempeñaron su papel trayéndolo al mundo para ayudar a las personas a cambiar
de pensamiento más ligero. Además, el Curso
se ajusta perfectamente a la época en que vivimos, una era dominada aún por un
cristianismo que no es muy cristiano, a pesar de los muchos cambios radicales
que han ocurrido en los últimos veinte años, y de que es una era de la
psicología.
Sobre todo,
esta es una era en la que nos hemos apartado mucho de la idea racional de que
la salvación no radica en el ataque, y mucho más demente en términos de creer
que los intereses separados -tanto personalmente como internacionalmente- son
la manera de salir de este infierno. Por otra parte, vivimos en una era que
cuestiona seriamente los valores de nuestras autoridades -políticas,
religiosas, científicas, sociales, educativas, etc.- y por consiguiente,
estaría relativamente receptiva a nuevas ideas. Debido a esto, muchos
consideran a Un Curso En Milagros
como parte de la Nueva Era, aunque su mensaje trasciende por mucho el
pensamiento de la Nueva Era y es más parte de las grandes tradiciones antiguas
de la espiritualidad.
Pero si el tiempo no
existe,
¿por qué sería necesario apresurar las cosas?
¿por qué sería necesario apresurar las cosas?
Eso es
cierto. Sin embargo, suponga que su hijo está sufriendo una pesadilla. Usted
sabe que es una pesadilla, pero aún dentro de la misma su hijo sufre. Por lo
tanto, como padre usted querría disminuir el sufrimiento de su hijo, aun cuando
usted sabe que ese sufrimiento no es real. Esa es básicamente la forma en que
el Espíritu Santo lo vería o Jesús lo vería. No es que nuestro dolor
sea real, sino que nosotros creemos que es real y esta es una forma de
ayudarnos a salir de nuestro dolor.
¿Podría decir algo
acerca de la procedencia de la culpa?
La fuente
básica de la culpa es nuestra creencia de que atacamos a Dios y nos separamos
de Él. Eso es lo que el Curso llama pecado, y ciertamente es lo mismo que el
pecado original. Debido a la creencia de que atacamos a Dios y nos separamos de
Él vamos a sentir culpa, y la culpa es una experiencia psicológica que nos dice
que hemos pecado. De ahí proviene el miedo a lo que Dios hará para vengarse.
Nosotros atacamos a Dios; ahora Él nos va a castigar. Este es el meollo del
sistema del ego. De ahí es que procede toda nuestra culpa: la creencia de que
hemos victimado a Dios, lo que luego proyectamos sobre todas las situaciones de
nuestras vidas, al creer que victimamos a otras personas. Rápidamente
invertimos eso y creemos que la gente nos convierte en sus víctimas.
¿No dice el Curso que si
perdonamos a una
persona las hemos perdonado a todas?
persona las hemos perdonado a todas?
Sí. Puesto
que todas las dificultades provienen de nuestra culpa, si en verdad perdonamos
a una persona totalmente, en efecto hemos perdonado a todo el mundo, porque a
fin de cuentas todo es el mismo problema.
Es como golpear el bolo
delantero en el juego de bolos;
todos los demás bolos se derrumban.
todos los demás bolos se derrumban.
Correcto;
esa es una buena analogía. Hay una hermosa lección en el libro de ejercicios
que dice: "permaneceré muy quedo por un instante e iré a mi hogar". L-pI.182,
la cual parece sugerir que podría hacerse así de fácil [un tronar de dedos], y
se acabó. El problema es que la cantidad de miedo que está atrapada en este
sistema es inmensa. La fuente básica del miedo es el miedo al amor o el miedo a
Dios. El ego nos enseña que si realmente nos liberamos de todo ese miedo, Dios
nos destruirá. Eso es lo que impide que permanezcamos quedos por un instante y
vayamos a nuestro hogar. En principio lo podríamos hacer, porque todo es lo
mismo, sólo hay un problema. Pero debido a que nuestro miedo es tan inmenso lo
que hacemos es cortarle trocitos, así que Un
Curso En Milagros nos lleva a trozarlo un poco más rápidamente.
¿Y el miedo es
inconsciente todo el tiempo?
Es
inconsciente porque la represión es la única forma en que podemos tolerar esta
cantidad de miedo.
De vez en cuando yo
tengo la impresión de que esto no es tan serio como todo el mundo parece creer
que es; algún nivel en mí me dice siempre: "¡No tomes esto tan
seriamente!"
Eso es
absolutamente cierto. Hay una línea en el Curso
que habla de la separación como el momento aquel cuando el Hijo de Dios olvidó
reírse. T-27.VIII.6:2. Pero ese es exactamente el problema. La separación fue
el momento en que el Hijo de Dios se olvidó de reír. Todo el problema fue que
cuando nos separamos de Dios lo tomamos en serio. Si nos hubiéramos reído y nos
hubiéramos percatado de cuán tonto era tratar de crear como Dios, usurpando Su
papel de Creador, nada de esto hubiera sucedido. Lo que nosotros hacemos es
fabricar problemas, y luego los tomamos muy en serio.
Después
pasamos el resto de nuestras vidas tratando de resolver un problema que no
existe. Es como el mago de Oz; él no es nada más que un hombrecito detrás de un
enorme sistema de amplificación. Eso es el ego. En otros lugares el Curso habla sobre cómo el ego parece
ser un león rugiente, pero en realidad es un ratón asustado que le ruge al
universo. T-21.VII.3:11; T-22.V.4:3. Si pudiéramos aprender a no tomar a
nuestros egos tan en serio, estaríamos mejor. Lo que hay que vigilar, sin
embargo, es que no neguemos un problema que hemos hecho real. Ese es el truco,
porque nosotros nos engañamos muy fácilmente al creer que nos hemos liberado de
un problema cuando todo lo que hemos hecho es ocultarlo.
¿Cómo se sabe?
Si hace lo
que es correcto, eventualmente se sentirá mejor, más en paz. Al principio,
hablamos sobre la idea de que "los milagros son a la vez comienzos y
finales, y así alteran el orden temporal." Podemos entender que lo que
esto significa es que los milagros aíslan los problemas y dicen: "Es aquí
donde nos concentramos," y al erradicar eso se altera el orden temporal.
Lo que usted en realidad hace, puesto que todos nuestros problemas están
arraigados en el pasado, es admitir que el problema no radica en el pasado.
Realmente, está aquí ahora mismo en el presente, justo aquí en el momento que
elijo, y ahora podría elegir de una manera distinta.
Entonces,
los problemas se convierten en "afirmaciones de renacimiento, que parecen
retroceder pero que en realidad van hacia adelante." Esto es lo que quería
decir el Curso con "nacer de
nuevo," la frase que utiliza más adelante. T-13.VI.3:5. Esto no quiere decir nacer otra vez como lo plantean
los cristianos fundamentalistas. Significa nacer otra vez en el sentido de
escoger una vida que se rija de acuerdo con el Espíritu Santo y no de acuerdo con el ego. Seguir al ego conduce a
la muerte; seguir al Espíritu Santo
nos conduce de regreso a la vida eterna.
El milagro, en verdad, es la afirmación de
esa vida eterna, lo cual se convierte luego en un renacer en términos de que
pensamos de manera distinta. Parece retroceder porque sana el pasado. Si me
siento enojado con usted en este preciso momento, es porque no estoy viviendo
con usted justo este momento; estoy trayendo algo del pasado. La sección que
aparece más adelante en el texto y que se titula Sombras del pasado. T-17.III, explica cómo siempre vemos a
la gente en términos del pasado, bien sea por cosas que creemos que nos han
hecho a nosotros o que les han hecho a otras personas, o basados en nuestro
pasado y en la clase de necesidades que creíamos tener. Así que, el milagro deshace el pasado en el
presente, y eso libera el futuro.
Por lo
tanto, el milagro toma la visión
egocéntrica del tiempo y nos libera de ella. La visión egocéntrica del tiempo
que, repito, es lineal, toma la culpa del pasado y la proyecta al futuro.
Debido a mi pasado culpable, siento miedo ahora de lo que me depara el futuro.
Me sentiré inseguro de si tendré dinero suficiente para mi vejez, o me sentiré
inseguro o temeroso de que me suceda algo terrible. Todos estos miedos tienen
sus raíces en la culpa que radica en el pasado, la cual está arraigada en la
creencia de que he pecado en contra de Dios.
Lo que hace
el ego al utilizar el tiempo es usar el pasado, proyectarlo hacia el futuro, y
de ese modo hacer caso omiso del presente. Hay una sección al principio del
Capítulo 15 titulada Los dos usos del tiempo. T-15.I que es una exposición muy buena de cómo el ego utiliza el
tiempo y luego cómo lo utiliza el Espíritu
Santo. Lo que hace el Espíritu Santo
es decirnos que el pasado no existe, porque el mismo se fundamenta en una culpa
que no es real.
Por lo
tanto, no hay nada que temer en el futuro. Luego nos enseña que el único tiempo
que existe, es el ahora; sólo existe el presente, una afirmación que hace el Curso más adelante. L-pI.8.1:5; L-pI.132.3:1. Eso le
permite al Espíritu Santo extenderse
a través de nosotros y, así, el futuro se convierte en una extensión del
presente de tal manera que la paz, el amor y la unidad que sentimos ahora se
extiende por medio de nosotros. Eso es lo que determina todo lo demás.
¿Significa todo eso que
hay que permanecer en una relación?
No, por
supuesto que no. Eso tiene que ver con forma o con conducta, y no hay nada en Un Curso En Milagros que jamás sugiera
lo que usted debe hacer en una situación determinada. Este simplemente provee
el medio—el perdón—con el cual usted puede sacar a su ego de en medio de modo
que pueda ser guiado por Aquel Que sabe lo que es mejor para usted en esa
situación. Pídale al Espíritu Santo
primero, antes de actuar; pero antes de preguntar "¿Qué debo hacer?,"
debe pedir que lo ayude a deshacerse de sus inversiones egocéntricas en el
resultado que—de una manera o de otra interferirían con que usted escuche Su
respuesta.