Este curso no pretende enseñar el significado del amor, pues eso está más allá de lo que se puede enseñar. Pretende, no obstante, despejar los obstáculos que impiden experimentar la presencia del amor, el cual es tu herencia natural.
Si estás dispuesto a renunciar al papel de guardián de tu sistema de pensamiento (ego) y ofrecérmelo a mí (Jesús), yo lo corregiré con gran delicadeza y te conduciré de regreso a Dios.