1. ¿QUÉ ES QUÉ?
MILAGRO (78) – el cambio de idea que modifica nuestra percepción del mundo del ego de pecado, culpa, y miedo al mundo de perdón del Espíritu Santo; invierte la proyección al devolverle a la mente su función causativa, lo cual nos permite escoger de nuevo; trasciende las leyes de este mundo para reflejar las leyes de Dios; se logra al unirnos con el Espíritu Santo o Jesús y es el medio para sanar nuestra propia mente y las mentes de otros.
[no debe confundirse con el concepto tradicional de los milagros como cambios en los fenómenos externos.]
UNA PEQUEÑA DOSIS DE BUENA VOLUNTAD (129) – esto, junto con el Espíritu Santo, es todo lo que requiere la Expiación; nuestro ego parece hacer imposible el des-hacimiento de la culpa, y por nuestra cuenta sería imposible, pero la buena voluntad de perdonar permite que el Espíritu Santo la deshaga por nosotros; mirar nuestra culpa sin juzgarnos, o mirar nuestra culpa con el Espíritu junto a nosotros.
PROCESO (102) - Un Curso de Milagros enfatiza que en el sueño de la separación el perdón ocurre con el tiempo, y es por lo tanto un proceso de crecimiento; nuestro miedo al Amor de Dios es tan grande que nos aferramos a nuestro especialismo como protección, y de ese modo aprendemos suavemente y pacientemente que la culpa y el ataque del ego refuerzan el dolor, mientras que el perdón del Espíritu Santo conduce a la dicha.
PAZ (93) - La meta del Curso; la condición para el logro del conocimiento y el regreso a casa; oculta por cuatro obstáculos—nuestra atracción al ataque (culpa), el dolor, la muerte y el miedo a Dios—los cuales se superan al enseñar y aprender el perdón.
DESPERTAR (26) – el Curso habla de la separación como si fuera un sueño del cual necesitamos despertar; la salvación, por lo tanto, consiste en escuchar al Espíritu Santo—la llamada a que despertemos—en nosotros mismos y en nuestros hermanos, de ese modo aceptamos la unidad de los unos con los otros que deshace la separación la cual originó el sueño en el principio.
DIOS (29) – la Primera Persona de la Trinidad, el Creador, la Fuente de todo ser o de toda vida; el Padre, Cuya Paternidad se establece por la existencia de Su Hijo, Cristo; la Primera Causa, Cuyo Hijo es Su Efecto; la esencia de Dios es espíritu, el cual se comparte con toda la creación, cuya unidad es el estado de Cielo.
CIELO (11) – el mundo no-dualista del conocimiento, donde moran Dios y Su Creación en la perfecta unidad de Su Voluntad y espíritu; aunque excluyente del mundo de la percepción, el Cielo puede reflejarse aquí en la relación santa y el mundo real.
CRISTO (17) – la Segunda Persona de la Trinidad; el único Hijo de Dios o la totalidad de la Filiación, el ser que Dios creo por medio de la extensión de su espíritu, aunque Cristo crea tal como lo hace Su Padre, Él no es el Padre puesto que Dios creo a Cristo, pero Cristo no creo a Dios.
[Cristo no debe equipararse exclusivamente con Jesús.]
JESÚS (58) – la fuente del Curso, su primera persona o “Yo”; el primero que completo su parte en la Expiación, lo cual lo capacitó para que se hiciera cargo de todo el plan; al trascender su ego, Jesús se ha identificado con Cristo y ahora puede servir como nuestro modelo para aprender y ser la ayuda siempre presente cuando lo invocamos en nuestro de perdonar.
2. ¿QUIEN ES QUIEN? / EN LA NO-DUALIDAD PURA
CIELO (11) – el mundo no-dualista del conocimiento, donde moran Dios y Su Creación en la perfecta unidad de Su Voluntad y espíritu; aunque excluyente del mundo de la percepción, el Cielo puede reflejarse aquí en la relación santa y el mundo real.
CONOCIMIENTO (14) – el Cielo, o el mundo de Dios y de Su creación unificada que existía antes de la separación en el cual no hay diferencias o formas, por lo cual excluye al mundo de la percepción; no debe confundirse con el uso común de “conocimiento” que implica el dualismo de un sujeto que conoce y un objeto que es conocido; en el Curso refleja la experiencia pura de no-dualidad, en la cual no existe la dicotomía sujeto-objeto.
CREACIÓN (15) – la extensión del ser o espíritu de Dios, la Causa, que resulto en su Hijo, el Efecto; se describe como el primer Advenimiento de Cristo; la función del Hijo en el Cielo es crear, tal como fue la de Dios al crearlo a Él.
[La Creación existe únicamente en el nivel del conocimiento, y no es equivalente a la “creación” o “creatividad” tal como se utilizan estos términos en el mundo de la percepción.]
[La Creación existe únicamente en el nivel del conocimiento, y no es equivalente a la “creación” o “creatividad” tal como se utilizan estos términos en el mundo de la percepción.]
CREACIONES (16) – las extensiones de nuestro espíritu; los efectos de nuestra capacidad creadora, análoga a la creación cuando Dios creó a Su Hijo al extenderse a Sí Mismo; como extensiones de Cristo, nuestras creaciones son parte de la Segunda Persona de la Trinidad; la creación sigue su curso en el Cielo, más allá del tiempo y del espacio, e independiente de la falta de consciencia que de la misma tiene el Hijo en este mundo.
CRISTO (17) – la Segunda Persona de la Trinidad; el único Hijo de Dios o la totalidad de la Filiación, el ser que Dios creo por medio de la extensión de su espíritu, aunque Cristo crea tal como lo hace Su Padre, Él no es el Padre puesto que Dios creo a Cristo, pero Cristo no creo a Dios.
[Cristo no debe equipararse exclusivamente con Jesús.]
JESÚS (58) – la fuente del Curso, su primera persona o “Yo”; el primero que completo su parte en la Expiación, lo cual lo capacitó para que se hiciera cargo de todo el plan; al trascender su ego, Jesús se ha identificado con Cristo y ahora puede servir como nuestro modelo para aprender y ser la ayuda siempre presente cuando lo invocamos en nuestro de perdonar.
[Jesús no debe equipararse exclusivamente con Cristo, la Segunda Persona de la Trinidad.]
ESPÍRITU (36) – la naturaleza de nuestra verdadera realidad la cual, al ser de Dios, es inmutable y eterna; se contrasta con el cuerpo, la encarnación del ego, el cual cambia y muere; el Pensamiento en la Mente de Dios que es el Cristo unificado.
ESPÍRITU SANTO/VOZ POR DIOS/RESPUESTA (37) – la Tercera Persona de la Trinidad Quien se describe metafóricamente en el Curso como la Respuesta de Dios a la separación; el Vínculo de Comunicación (Eslabón) entre Dios y Sus Hijos separados, y que salva la brecha entre la Mente de Cristo y nuestra mente dividida; la memoria de Dios y Su hijo que trajimos con nosotros al sueño; Aquel Que ve nuestras ilusiones (percepción) y nos conduce a través de ellas hacia la verdad (conocimiento); la Voz de Dios que habla por Él y por nuestro Ser real, recordándonos la Identidad que olvidamos; también se conoce como Puente, Consolador, Guía, Mediador (Intercesor), Maestro y Traductor.
HIJO DE DIOS (49)
conocimiento: La Segunda Persona de la Trinidad; el Cristo que es nuestro verdadero Ser.
percepción: nuestra identidad como Hijos separados, o el Hijo de Dios como ego con una mente errada y correcta; la frase bíblica “hijo del hombre” rara vez se usa para designar al Hijo como separado.TRINIDAD (127) – la unidad de Sus Niveles no se puede entender en este mundo; consiste de (1) Dios, el Padre y Creador, (2) Su Hijo, Cristo, nuestro verdadero Ser, que incluye a nuestras creaciones y (3) el Espíritu Santo, la Voz por Dios.
REINO DE DIOS, CIELO ver: Cielo (10)
3.¿QUE ES QUE? / DUALIDAD-ILUSIÓN
EGO (32) – La creencia en la realidad del yo (ser) separado o falso, el cual se hizo como substituto del Ser que Dios creó; el pensamiento de separación que hace que surjan el pecado, la culpa y el miedo, y un sistema de pensamiento basado en el especialismo para protegerse a sí mismo; la parte de la mente que cree estar separada de la Mente de Cristo; esta mente tiene dos partes: mente errada y mente correcta; casi siempre el ego se utiliza para designar la “mente errada” pero puede incluir la parte de la mente dividida que puede aprender a escoger la mente correcta.
[No debe equipararse con el “ego” del psicoanálisis, pero se puede equiparar, más o menos, con la psiquis entera, de la cual el “ego” psicoanalítico forma parte.]
ILUSIÓN (53) – algo que se cree que es real pero que no lo es; la ilusión última es la separación de Dios, sobre la cual descansan todas las manifestaciones del mundo separado de Dios, sobre lo que puede considerarse como distorsiones en percepción; i.e., ver ataque en lugar de un pedido de amor, pecado en vez de error, las ilusiones del mundo refuerzan la creencia de que el cuerpo tiene un valor en sí, una fuente de placer o de dolor; el perdón es la ilusión final, puesto que perdona lo que jamás fue, y conduce más allá de la ilusión hacia la verdad de Dios.
[No debe equipararse con el “ego” del psicoanálisis, pero se puede equiparar, más o menos, con la psiquis entera, de la cual el “ego” psicoanalítico forma parte.]
ILUSIÓN (53) – algo que se cree que es real pero que no lo es; la ilusión última es la separación de Dios, sobre la cual descansan todas las manifestaciones del mundo separado de Dios, sobre lo que puede considerarse como distorsiones en percepción; i.e., ver ataque en lugar de un pedido de amor, pecado en vez de error, las ilusiones del mundo refuerzan la creencia de que el cuerpo tiene un valor en sí, una fuente de placer o de dolor; el perdón es la ilusión final, puesto que perdona lo que jamás fue, y conduce más allá de la ilusión hacia la verdad de Dios.