Deshacer el Miedo

LA VOZ DEL ESPÍRITU SANTO: EL ÚNICO REMEDIO

El primer paso correctivo para deshacer el error es darse cuenta, antes que nada, de que todo conflicto es siempre una expresión de miedo. Dite a ti mismo que de alguna manera tienes que haber decidido no amar, ya que de otro modo el miedo no habría podido hacer presa en ti. A partir de ahí, todo el proceso correctivo se reduce a una serie de pasos pragmáticos dentro del proceso más amplio de aceptar que la Expiación es el remedio.

Estos pasos pueden resumirse de la siguiente forma:

Reconoce en primer lugar que lo que estás experimentando es miedo.
El miedo procede de una falta de amor.
El único remedio para la falta de amor es el amor perfecto.
T-2.VI.7:1-8


El único remedio es la Voz que habla por Dios, el Espíritu Santo...



Si aceptas el remedio para el pensamiento
desordenado, remedio cuya eficacia es indudable,
¿cómo iban a seguir estando presente sus síntomas?
La continua decisión de permanecer separado es la única razón posible de que siga habiendo sentimientos de culpabilidad. Hemos dicho esto antes, pero no subrayamos los resultados destructivos de tal decisión.  

Cualquier decisión de la mente afecta tanto al comportamiento como a la experiencia. Lo que tú deseas, esperas que tenga lugar. Esto no es algo ilusorio. Tu mente ciertamente forja tu futuro, y se lo devolverá a la creación plena en cualquier momento si primero acepta la Expiación. 

...la mente, Retornará asimismo a la creación plena en el instante en que haya hecho eso. Al haber renunciado a su pensamiento desordenado, la correcta ordenación del pensamiento se hace evidente. T-5.V,7-8
Mi papel [Jesús ó Espíritu. Santo] consiste únicamente en desatar las cadenas que aprisionan tu voluntad y liberarla. Tu ego no puede aceptar esta libertad, y se opondrá a ella siempre que pueda y en cualquier forma que pueda. T-5.V.2:9
Finalmente el aspecto pratico para deshacer el miedo consiste en reconocerlo:  El PODER para aceptar el único remedio radica en el SILENCIO INTERNO en quieta y silenciosa invocación a nuestro SER:
T-5.VI.3. Acuérdate siempre del Reino, y recuerda que tú que formas parte de él, jamás te puedes perder.

T-5.V.4. Todo lo que aceptas en tu mente se vuelve real para ti. Es tu aceptación lo que le confiere realidad. El permitirle la entrada al ego en tu mente y entronarlo allí, es lo que lo convierte en tu realidad. Eso se debe a que la mente es capaz de crear realidad o de fabricar ilusiones. Dije anteriormente que tienes que aprender a pensar con Dios. Pensar con Él es pensar como Él, lo cual produce dicha -y no culpabilidad porque es algo natural.